Nos quedó claro que extracelular, intracelular e intranuclear están conectados, que hay un flujo de información que se mueve, dándonos a entender que hay una manera de señalización que regula el movimiento de los sistemas del cuerpo.
A través de la información que se está moviendo va a decirle a la célula que debe hacer, por lo tanto esa célula podrá generar un proceso adaptativo que será de salud si la información, si el flujo de información es epigenéticamente positivo y será de enfermedad si el flujo de información es epigenética mente negativa.
La matriz viviente es fundamental en todos los procesos de defensa y de reparación, si nosotros le aportamos, si nosotros le entregamos al sistema la información correcta el se autorregula, en teoría el organismo viviente no está diseñado para enfermarse. La enfermedad es un resultado de una adaptación fallida, de una adaptación disregulativa como consecuencia de un input, de una entrada de señales inadecuadas verbigracia dieta y estilo de vida, sedentarismo, toxicidad y mil factores más que pueden estar operando como factores epigenéticos negativos.
Debemos entender a la matrix viviente como lo que nos permite hacer cambios de regulación y adaptación en el cuerpo, consecuencia del flujo de información.
