El conocimiento de la estructura de la matriz viviente nos muestra que el extracelular, el intracelular y el intranuclear están interconectados, esa interconexión tiene como propósito dar paso a la información que permite los cambios y las respuestas de la célula adaptativas, lo que hace necesario analizar cómo ocurre el flujo de información dentro de los sistemas vivientes.
Pero encontramos una gran controversia, es la discusión entre el mecanicismo reduccionista y el holismo, en el sentido de la tendencia al no considerar la integración total del organismo.
Durante años el paradigma dominante de la medicina nos llevó a que el cardiólogo se encargaba del corazón, el gastroenterólogo del sistema digestivo, el neumólogo del pulmón ,el otorrino del terreno del aparato respiratorio superior, etc., y que cada uno trabaja independientemente, manejaba las enfermedades independientemente, con lo cual no había ninguna misión de integración.
La matriz viviente tiene flujos de información que permiten que garantizan constantemente la adaptación y la regulación del sistema, para mantener el equilibrio que llamábamos homeostasis.